Las vacaciones de invierno en el espacio rumano comienzan el 30 de noviembre con la fiesta de San Andrés y se prolongan hasta San Juan, el 7 de enero. En este intervalo tienen lugar las más bellas tradiciones y costumbres populares de la época precristiana, así como ritos y celebraciones religiosas cristianas. Estas fiestas traen a nuestra vida alegría, felicidad, experiencias espirituales especiales generadas por el significado de los acontecimientos que atravesamos: San Andrés el 30 de noviembre, San Nicolás el 6 de diciembre, San Espiridón el 12 de diciembre, la Navidad, Fiesta del Nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo el 25 de diciembre, San Esteban el 26 de diciembre, Año Nuevo – San Basilio el 1 de enero, la Epifanía/Bautismo del Señor el 6 de enero, y San Juan Bautista el 7 de enero.
Desafortunadamente, muchas de nuestras tradiciones se pierden o se mezclan con las tradiciones de otros países y por muy hermosos que sean los villancicos ingleses o las películas estadounidenses, de vez en cuando sería bonito recordar también nuestras costumbres antiguas que, de hecho, nos representan a nosotros, los rumanos. Intentaré, en el programa de hoy de la Miscelánea, cubrir algunas zonas etnográficas de Rumanía y presentarles varias costumbres rumanas de invierno.
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