Descontentos en el sistema educativo
Los sindicalistas de la educación rumana están hoy en huelga japonesa, descontentos con las propuestas recientes sobre ciertas medidas de reducción de los gastos presupuestarios en el sistema.

Sorin Iordan, 18.06.2025, 11:43
Los sindicalistas del sistema educativo rumano están en huelga japonesa, descontentos con las propuestas de los partidos parlamentarios sobre las medidas para reducir el déficit presupuestario, de las que dicen que les afectarían directamente. Se reunieron el martes con el ministro de educación, Daniel David, a quien le comunicaron que rechazan cualquier recorte de los gastos presupuestarios que repercutan en los ingresos del personal docente.
Ellos piden que se mantenga el horario laboral actual y consideran que aumentarlo a 8 horas diarias sería una decisión irresponsable porque los docentes ya están sobrecargados con actividades educativas y extracurriculares, con actividades de formación continua y con tareas administrativas.
Además, los profesores opinan que reducir el umbral salarial en función del cual se otorgan los vales de vacaciones y la compensación alimentaria llevará a la eliminación de estos derechos para un número significativo de empleados y conducirá a una disminución del poder adquisitivo, especialmente en el caso de los profesores que están al inicio de su carrera, el personal docente auxiliar y el personal administrativo.
Los sindicalistas se oponen también a la reducción del personal en los institutos nacionales de investigación y desarrollo y en las instituciones de la Academia Rumana. No menos importante, no están de acuerdo con la eliminación del ingreso adicional por el título científico de doctor, medida que podría reducir los ingresos de quienes poseen este título en aproximadamente 550 leus (alrededor de 110 euros) netos.
El presidente de la Federación «Spirul Haret», Marius Nistor, explicó que la acción de protesta se lleva a cabo en las unidades de educación preuniversitaria, en las instituciones de educación superior, en las bibliotecas universitarias centrales y en los institutos de investigación.
Marius Nistor:
«La gente llevará insignias con lemas que están estrictamente relacionados con las razones de la acción en cuestión. Las clases se llevarán a cabo con normalidad. Nuestra acción no afecta a los estudiantes de ninguna manera. No estamos hablando de un impacto en los exámenes que se estén llevando a cabo, pero la clase política debe entender claramente que no pueden burlarse indefinidamente del sistema educativo. En caso de que no tengan en cuenta nuestras advertencias, no deben olvidar que no es imposible revivir lo que ocurrió en 2023».
A su vez, el presidente de la Federación de Sindicatos Libres de Educación, Simion Hăncescu, anunció que los sindicatos no excluyen una huelga general, si no se encuentran soluciones a sus demandas.
Simion Hăncescu:
«Le dije al presidente de Rumanía que tiene todas las palancas para intervenir en la situación en la que constatará que aquellos que asumirán el gobierno cometan desviaciones y ataquen al sistema educativo. Dejé en claro que es posible que el comienzo del próximo curso escolar sea perturbado por protestas, si se toman medidas que afecten a nuestros compañeros de trabajo».
El viernes pasado, los sindicatos de trabajadores de la Educación emitieron un comunicado en el que expresaron su desacuerdo con las medidas que podrían adoptarse para reducir el déficit presupuestario. El ministro de Educación transmitió entonces que el motivo de la insatisfacción de los docentes es una mezcla de aspectos irrelevantes con rumores e interpretaciones erróneas.
Versión en español: Victoria Sepciu