El Gobierno aprueba nuevas leyes de educación

La educación rumana se prepara para nuevos cambios.

Bogdan Matei, 30.03.2023, 11:21

En más de 30 años de poscomunismo en Rumanía,
no ha habido campo más sujeto a cambios, a menudo bastante inquietantes, que la
Educación. La inestabilidad política crónica ha dado lugar a un sinfín de
figuras diferentes al frente del ministerio competente, todas ellas deseosas de
innovar y asegurar así su posteridad. Como no duraron mucho en el cargo, lo
único que consiguieron en general fue deshacer las reformas promovidas por sus
predecesores. Después de tres décadas de continuas innovaciones, los resultados
están a la vista. Tanto los alumnos como los padres culpan a la confusión
provocada por el cambio de reglas durante el partido. Los rumanos que pueden permitírselo
prefieren enviar a sus hijos a estudiar al extranjero. Los licenciados locales
más brillantes también optan por abandonar el país. La educación técnica ya no
produce gran cosa, por lo que cada vez es más difícil encontrar un fontanero o
un mecánico de coches cualificado. Debido al estrés y a los bajos salarios, la
profesión docente tampoco resulta ya atractiva, por lo que el número de
profesores interinos va en aumento, sobre todo en el campo y las ciudades
pequeñas. Aunque las cifras no siempre son coherentes, todos los estudios de
expertos apuntan a una elevada tasa de analfabetismo funcional entre los
titulados escolares rumanos.

En medio de este sombrío panorama, la actual ministra
de Educación, Ligia Deca, anuncia también importantes cambios en este campo,
que según ella mejorarán la situación. Redactados bajo su dirección, los
proyectos de ley de educación fueron aprobados por el Gobierno el miércoles y
serán enviados al Parlamento para su debate y adopción. El paquete de leyes se
basa en la visión generada por el proyecto «Rumanía Educada», lanzado poco
después de la investidura en 2014 por el presidente Klaus Iohannis, él mismo
antiguo profesor de instituto en provincias. La ley de enseñanza superior
pretende combatir el abandono universitario y apoyar la cooperación europea
entre las universidades rumanas. La ley de educación preuniversitaria tiene
como principal objetivo reducir el abandono escolar y el analfabetismo
funcional.

La ministra Deca también promete hacer que el sistema educativo esté
más centrado en el alumno y estimular el potencial de cada niño. Se han
asignado más de 3.000 millones de euros para aplicar las nuevas leyes, que
Rumanía recibió de Bruselas a través del Plan Nacional de Recuperación y
Resiliencia. Ligia Deca dice estar convencida de que las leyes de educación se
aprobarán en el Parlamento por el procedimiento de urgencia, un hecho criticado
por el partido de la oposición USR, que acusa a la coalición gobernante
PSD-PNL-UDMR de querer un paquete legislativo apresurado sin un debate serio. USR
también anunció que estaba preparando enmiendas para lo que denominó una
verdadera reforma del sistema.

Traducción al español: Antonio Madrid