La gastronomía tradicional rumana en otoño es una celebración de sabores, historia y comunidad. Entre septiembre y noviembre, los mercados se llenan de productos frescos, y las familias se reúnen para cocinar, conservar y compartir.
La historia del pan en Rumanía se remonta a la antigüedad, cuando dacios y romanos horneaban pan con trigo, centeno y cebada.