Debates sobre la reforma de la administración pública local
Una semana más termina sin que la coalición gobernante (PSD-PNL-USR-UDMR) haya tomado una decisión sobre la forma definitiva de la reforma de la administración local.
Daniela Budu, 17.10.2025, 11:18
Tras más de dos meses de negociaciones y varias reuniones aplazadas, la reforma de la administración local en Rumanía sigue estancada. Esta semana también termina sin que la coalición de Gobierno (PSD, PNL, USR y UDMR) haya tomado una decisión sobre la forma definitiva de la reforma y, por ende, sobre el número de funcionarios de los ayuntamientos y consejos distritales que deben ser despedidos.
El primer ministro, Ilie Bolojan, apoya el despido efectivo de unos 13 000 funcionarios, mientras que el PSD propone que sean los alcaldes y los ministros quienes decidan cómo reducir los gastos, ya sea mediante despidos, recortes salariales o la eliminación de complementos salariales. En la reunión de esta semana, los socialdemócratas presentaron su propio paquete de reformas económicas y pidieron que se aprobara al mismo tiempo que la reforma administrativa.
Por otra parte, el Gobierno rumano ha decidido aplazar hasta la próxima semana las modificaciones de la Ordenanza de Urgencia 52, que impide a los alcaldes realizar gastos excesivos en reparaciones y adquisiciones a finales de año. La semana pasada, las autoridades anunciaron que cambiarían la normativa después de que varios alcaldes del país advirtieran de que ésta les impediría llevar a cabo su actividad.
En una rueda de prensa, el ministro de Desarrollo, Cseke Attila, declaró que es esencial que el Ejecutivo y la coalición de Gobierno tomen rápidamente una decisión sobre la reforma de la administración local y advirtió de que la prolongación de las discusiones afecta al proceso político y a la eficiencia a nivel local. Cseke Attila precisó que la UDMR aboga por un enfoque diferenciado para cada localidad, ya que no es justo que los ayuntamientos que han demostrado su eficacia se vean obligados a recortar gastos. Añadió que hay alrededor de 700 unidades administrativas territoriales en las que no debería reducirse ningún puesto de trabajo.
Cseke Attila:
«No me parece justo aplicar la misma medida a todo el mundo, mientras haya autoridades locales, ayuntamientos y alcaldes que hasta ahora han gestionado eficazmente el dinero público y en los que no deberíamos hacer recortes significativos. También existe la variante que hemos propuesto a la coalición: aplicar un porcentaje del 30 %, lo que finalmente supondría una reducción del 10,2 % de los puestos ocupados».
Por otro lado, Cseke Attila propuso a la coalición gubernamental un proyecto para modificar la clasificación de las localidades rumanas que ya no cumplen los actuales criterios de población. De este modo, varias localidades pasarían a ser municipios, ya que superan los 40 000 habitantes. Además, el ministro añadió que, si se aceptan las propuestas, 45 aldeas del país se convertirían en ciudades, ya que superan los 10 000 habitantes.
Versión en español: Victoria Sepciu