La confusión política en Bucarest se está profundizando.
Rumanía ha tomado numerosas medidas para prevenir la propagación del coronavirus.
Las reacciones ante la reciente decisión del presidente Klaus Iohannis respecto al nombramiento de los fiscales jefes, son totalmente opuestas.
Es posible que el voto de investidura para el segundo gabinete de Ludovic Orban no tenga lugar el próximo lunes, 24 de febrero, tal como está previsto.
Los espíritus se caldean nuevamente en Rumanía tras la decisión del constitucional de invalidar una ordenanza de urgencia del Gobierno anterior.
En 2020, en Rumanía, 3.500.000 hogares todavía usan leña para calentarse y las estadísticas indican que una familia consume anualmente cinco metros cúbicos de leña.
Esta semana tendrán lugar las audiencias de los ministros del gabinete de Orban II. El próximo lunes está programado el voto de investidura.
La Comisión Europea ha estimado que la moderación del crecimiento de la economía rumana continuará tanto este año como en 2021.
Antiguas estrellas del deporte rumano piden a los políticos que apoyen la revitalización de este sector cada vez más perjudicado.
El Banco Nacional de Rumanía ha reducido su previsión de inflación para el 2020 del 3,1% al 3% y para el 2021 estima una inflación anual del 3,2%.
El Partido Social Demócrata (PSD) tiene mayoría en el Senado de Bucarest y ha rechazado la primera ordenanza de urgencia de este año de los liberales, actualmente en el poder.
Después del 2019, cuando tuvieron lugar las elecciones europarlamentarias y presidenciales, los partidos de Rumanía están preparando las elecciones locales y parlamentarias de este año.
En Bucarest reina la incertidumbre después de que otro Gobierno haya sido destituido mediante moción de censura.
Tres meses después de llegar al poder, el Gobierno liberal de Ludovic Orban ha sido destituido por una moción de censura.
El primer Gobierno monocolor liberal de la Rumanía postcomunista ha sido destituido este miércoles, a través de una moción de censura.