Rumanía y los inversores extranjeros
La dinámica de las inversiones extranjeras en Rumanía se está ralentizando hasta situarse en un nivel cercano al de la época de la pandemia.
Roxana Vasile, 10.04.2025, 11:31
Una empresa alemana abrirá una nueva fábrica en Rumanía que producirá componentes para aviones de pasajeros, anunció el miércoles el primer ministro, Marcel Ciolacu, en una reunión del Gobierno. Aunque la situación económica internacional es complicada, Rumanía sigue atrayendo a los grandes inversores, ha declarado el primer ministro, quien ha precisado que la empresa alemana, proveedora de los gigantes de la aeronáutica, ha elegido Rumanía, entre otras razones, por su posición estratégica entre el Este y el Oeste. Sin embargo, la realidad es que el atractivo de Rumanía para los inversores y la dinámica de las inversiones extranjeras en Rumanía se están ralentizando. Las razones están ligadas a la situación geopolítica, a la magnitud del déficit presupuestario, pero también a las incertidumbres políticas y fiscales, y la guerra comercial que se avecina tras las decisiones de la administración estadounidense de imponer aranceles aduaneros sustanciales, incluso a las importaciones procedentes de la Unión Europea, no hace sino minar aún más la confianza y el apetito por el riesgo de los inversores.
En estas condiciones, el mismo día en que el primer ministro Ciolacu anunció las inversiones alemanas en Rumanía, el presidente interino del país, Ilie Bolojan, se reunió también con los representantes del Consejo de Inversores Extranjeros, una asociación de la que forman parte los más importantes inversores de capital extranjero en Rumanía, con una cifra de negocios conjunta que representa aproximadamente una quinta parte del PIB. Un país no lo cambia un Gobierno o un presidente, dijo Bolojan, sino la gente de ese país y las empresas que invierten en él. Los políticos tienen, en cambio, la obligación de crear condiciones y previsibilidad para que se recompense el rendimiento y se penalice la falta de trabajo o de rendimiento, añadió el presidente. ¿Qué tendría que hacer Rumanía para situarse entre las diez primeras economías de la UE? Daniel Anghel, presidente del Consejo de Inversiones Extranjeras responde:
«El esfuerzo inversor medio anual debería situarse en torno al 35% del Producto Interior Bruto en el periodo 2024-2030 mientras que en el periodo 2031-2040, el esfuerzo inversor medio debería situarse en torno al 28-30% del Producto Interior Bruto. Cifras no precisamente fáciles de alcanzar. El contexto en el que nos encontramos no es nada alentador, pero creemos que, con una buena estrategia, con un diálogo que siente a la mesa a todos los actores importantes, tanto del sector empresarial como del público, podríamos crecer a un ritmo más rápido del que lo hemos hecho hasta ahora. »
En otras palabras, Rumanía puede aumentar su nivel de competitividad en la región con la ayuda de los grandes actores de la economía si se toman medidas estratégicas para estimular las grandes inversiones con alto valor añadido, fue una de las principales conclusiones de las discusiones entre los representantes del Consejo de Inversores Extranjeros y el presidente interino Ilie Bolojan.