Los estudiantes se están organizando para protestar
Las organizaciones estudiantiles de Rumanía han convocado protestas en todo el país para el 29 de septiembre, fecha en la que comienza el año académico.
Sorin Iordan, 19.09.2025, 12:07
El inicio del curso escolar en Rumanía estuvo marcado por las protestas de los docentes, que se mostraron descontentos con los cambios incluidos en el paquete de medidas destinadas a reducir el déficit presupuestario, por el que el Gobierno rumano asumió la responsabilidad en el Parlamento.
El 8 de septiembre, en algunos centros educativos del país no se impartieron clases y los profesores se negaron a participar en los actos conmemorativos, ya que estaban descontentos por tener que dar más horas de clase, por tener más alumnos en las aulas y por cobrar menos dinero.
Los estudiantes se unieron a los profesores. No están de acuerdo con las medidas de austeridad adoptadas este año, que han supuesto una reducción de las becas y la supresión de ciertos descuentos en el transporte local y ferroviario. La Alianza Nacional de Organizaciones Estudiantiles de Rumanía ha anunciado protestas en todo el país para el 29 de septiembre, fecha prevista para el inicio del año académico.
La organización ha comunicado que muchos estudiantes podrían abandonar sus estudios este año. Sus líderes señalan que en los últimos diez años ha habido una grave falta de financiación en lo referente al fondo de becas y protección social. La reducción de este fondo tendría efectos negativos en la trayectoria académica de los estudiantes en un contexto en el que el porcentaje de abandono universitario alcanza el 40 %.
El presidente de la Unión de Estudiantes de Rumanía, Cristian Ghiurcă, ha declarado que el ámbito universitario se ve muy afectado por las medidas de austeridad decididas por el Gobierno. Según él, la reducción de los fondos dejará a unos 44 000 estudiantes sin beca este año.
Cristian Ghiurcă:
«El fondo de becas se reduce en un 40 % para todas las universidades de Rumanía, por lo que cada una debe decidir si ofrece menos becas o una cantidad menor para los estudiantes. Se han hecho algunas promesas de que las cosas se arreglarán, pero todavía no se han cumplido. Seguimos en contacto con representantes del Ministerio, pero nos damos cuenta de que no podemos resolver nuestras solicitudes sólo por la vía diplomática y de que también debemos actuar en defensa de los intereses de los estudiantes, es decir, protestar».
Ghiurcă afirma que las becas deberían mantenerse en un importe y número razonables, al nivel del año 2024. También señaló que el hecho de que el pago de las becas se realice sólo durante el período de desarrollo de las actividades docentes y que se conceda una reducción del 90 % para el transporte ferroviario exclusivamente en la ruta entre el centro universitario y la localidad de residencia son otras decisiones que provocan el descontento de los estudiantes.
Esta semana, los representantes de los estudiantes participaron en una reunión en el Ministerio de Educación para identificar soluciones a los efectos de los cambios legislativos. El ministro en funciones, Daniel David, comunicó que ha iniciado conversaciones con el ministro de Fondos Europeos, Dragoş Pîslaru, para transferir fondos al programa de prevención del abandono universitario, y que la solución estará lista en unas semanas.
Añadió que, si lo desean y pueden permitírselo, las universidades pueden completar el fondo de becas y también ampliar el período de concesión de las mismas. La Universidad de Ciencias de la Vida de Iaşi ha adoptado esta solución y ha anunciado que, en el nuevo año académico, se concederán becas con cargo a los ingresos por recursos propios de la institución, así como a través de acuerdos de colaboración con varios operadores privados.
Versión en español: Victoria Sepciu