Maia Sandu, en el Parlamento Europeo
Es responsabilidad de los ciudadanos de la República de Moldavia elegir un Parlamento que lleve al país a la Unión Europea, declaró la presidenta Maia Sandu en el pleno del Parlamento Europeo.
Ştefan Stoica, 10.09.2025, 10:31
El discurso de la presidenta de la República de Moldavia, Maia Sandu, marcó el martes de la nueva sesión del Parlamento Europeo, sobre todo porque se produjo en un momento decisivo para el futuro del pequeño Estado mayoritariamente rumanohablante, situado en la frontera oriental de la Unión. «El resultado de las elecciones parlamentarias del 28 de septiembre, las más importantes en la historia de la República de Moldavia, decidirán si nos consolidamos como una democracia estable en el camino hacia la Unión Europea, como un vecino seguro de Ucrania y un proveedor de seguridad para la UE, o si Rusia nos desestabiliza, nos aleja de Europa y nos convierte en una amenaza en la frontera oriental de Europa», declaró Maia Sandu.
Según ella, la estabilidad de Moldavia es la estabilidad de Europa, y la paz de Moldavia es también la paz de Europa. La jefa del Estado moldavo considera que la República de Moldavia y Ucrania están preparadas para avanzar en las negociaciones de adhesión, en un proceso basado en los méritos que refleje el progreso de cada una. En su opinión, la Unión Europea nunca ha buscado la perfección, sino proteger las democracias frágiles hasta su consolidación. Según Maia Sandu, la Unión Europea es un socio sólido de su país, al que ha ayudado a reformarse, modernizarse y construir instituciones capaces de hacer frente a las presiones.
Ella rindió homenaje a Ucrania y a sus ciudadanos, que luchan por defender su país y su libertad, protegiendo así también a Moldavia. «Les debemos nuestra paz. Pero su sacrificio es también una advertencia: la paz nunca está garantizada. Por eso nuestro camino europeo no se basa solo en valores, sino también en la supervivencia. Y precisamente porque hemos avanzado mucho en este camino, Rusia ha desatado todo su arsenal de ataques híbridos contra nosotros. El campo de batalla son las elecciones», advirtió la presidenta Sandu.
Al final de su discurso, Maia Sandu se dirigió en rumano a los ciudadanos moldavos, a quienes transmitió que deberían estar orgullosos de haber construido una democracia viva y de haberla conservado durante tres décadas, incluso cuando algunos intentaron silenciarla o destruirla. «Hoy, sin embargo —señaló—, nuestra independencia y nuestra paz se ven nuevamente puestas a prueba: injerencias en nuestras elecciones, financiaciones ilegales desde el exterior, campañas de mentiras, ciberataques, protestas pagadas, tácticas para sembrar el odio entre las personas. Estos son los métodos con los que se intenta detener a Moldavia en su camino hacia Europa».
Y concluyó: «Ahora debemos dar el paso decisivo: elegir un parlamento que lleve a Moldavia a la Unión Europea. Esa es nuestra responsabilidad. El futuro de Moldavia depende del valor y la unidad con que acudamos a las urnas». Al final del discurso de la presidenta moldava, la eurodiputada independiente Diana Şoşoacă, representante de la corriente soberanista y ultranacionalista, gritó «¡Moldavia es Rumanía, Maia Sandu!». Su intervención fue recibida con abucheos por parte de la mayoría de los eurodiputados presentes.
Versión en español: Monica Tarău