Desde Rumanía hacia el mundo: Mujeres que han cambiado Rumanía
El 8 de marzo de 2024 el Día Internacional de la Mujer tiene como lema 'Invertir en las mujeres: acelerar el progreso'.
Simona Sarbescu, 05.03.2024, 15:43
Hoy hablamos sobre las mujeres, celebradas cada año, el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Lograr la igualdad de género y el bienestar de la mujer en todos los ámbitos es más crucial que nunca si queremos generar economías prósperas y conseguir un planeta saludable, se afirma en la web de la ONU.
Bienvenidos a una nueva edición del programa de todos los martes, soy la realizadora Simona Sarbescu y hoy hablamos sobre las mujeres, celebradas cada año, el 8 de marzo, Día internacional de la Mujer.
Lograr la igualdad de género y el bienestar de la mujer en todos los ámbitos es más crucial que nunca si queremos generar economías prósperas y conseguir un planeta saludable, se afirma en la web de la ONU.
El 8 de marzo de 1908 murieron 129 mujeres en un incendio en la fábrica Cotton de Nueva York, en Estados Unidos, luego de que se declararan en huelga en su lugar de trabajo. Desde entonces, esto se conmemora alrededor del mundo para hacer conciencia sobre la importancia de empoderar a las mujeres en todos los ámbitos, proteger sus derechos y garantizar que éstas puedan alcanzar todo su potencial; de igual forma sirve para visibilizar la desigualdad y discriminación que aún viven las mujeres.
Sin embargo nos enfrentamos a un desafío clave: no existe financiación suficiente en materia de género y contamos con un alarmante déficit anual de 360.000 millones de dólares en medidas de igualdad de género para 2030.
El 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer tiene como lema ‘Invertir en las mujeres: acelerar el progreso’.
Este maravilloso día es una ocasión perfecta para recordar a algunas de las personalidades más importantes: las mujeres que cambiaron Rumanía. Ya fueran escritoras, héroes de guerra, atletas, activistas, especialistas médicos o simplemente actuaran en campos antes reservados solo a los hombres, estas figuras femeninas cambiaron sistemas, derribaron barreras, revolucionaron campos y llevaron el nombre de Rumanía aún más lejos.
Sin duda, una de las presencias femeninas más apreciadas de Rumanía es la reina María, una personalidad con espíritu de lucha, conocida por su bondad y diplomacia.
Originaria de Inglaterra, la princesa de Edimburgo llegó a tierras de nuestro país con 17 años, pasando a convertirse en esposa de Fernando I y, más tarde, reina. Desde los primeros años que pasó aquí, María comienza a descubrir cada vez más su país de adopción. Se enamora de la cultura y de las personas, por las que luchará a nivel político. Negociará con ministros y diplomáticos, escribirá artículos sobre Rumanía, defenderá la causa del país y la promoverá más allá de las fronteras.
Durante la Primera Guerra Mundial, la reina María se mantuvo cerca de la gente y sus necesidades. Cuida a los soldados heridos, ayuda a los enfermos de tifus y cólera. Mientras tanto, también se ocupa del desarrollo del sistema de salud. En este sentido, coordina la colaboración con la Cruz Roja, organiza hospitales de campaña y recauda fondos para el servicio de ambulancias.
…..Ha habido muchas primicias en el mundo de la medicina rumana, y una de ellas es Sofia Ionescu-Ogrezeanu, la primera neurocirujana del mundo y miembro del primer equipo de neurocirugía de nuestro país.
Con el apoyo de su madre, comienza a estudiar en la Facultad de Medicina de Bucarest. Aunque explora diferentes especializaciones, termina realizando una pasantía en el Hospital N°9. Aquí realizará su primera intervención neuroquirúrgica, operando el cerebro, en 1944, de un niño herido en el primer bombardeo de la ciudad: El Hospital N°9 se convertirá en su hogar por 47 años, donde continúa operando, desarrollando, al mismo tiempo, el campo de la neurocirugía en todo el país.
Maria Rosetti, la primera mujer periodista en Rumanía
Fue la primera mujer periodista en Rumanía, en una época en la que esta práctica estaba exclusivamente dedicada a los hombres. María Rosetti fue también una de las principales pioneras durante la Revolución de 1848, apoyando con todas sus fuerzas los ideales nacionalistas de su marido C.A. Rosetti, quien fundaría la Academia Rumana y a quien María le «robó» las nociones elementales de la escritura periodística.
Hasta ese momento, María Rosetti había vivido bajo el nombre y el escudo de una familia en la que los hombres eran los principales pilares. Incluso su marido, C.A. Rosetti fue una de las personas más influyentes de esa época, siendo periodista, revolucionario y fundador del Partido Nacional Liberal, miembro de la gran familia de nobles Rosetti.
Maria Tănase, «El ruiseñor de la música rumana»
Sus canciones han traspasado la barrera del tiempo y continúan deleitando el alma de las personas, incluso si falleció quizás demasiado pronto. Quedó en la memoria de los rumanos gracias a su genio, inmenso talento y timbre vocal único que siempre logró sensibilizar a quien la escuchaba.
«Las canciones de esta niña, con su timbre profundo, brotan claras del suelo rumano, atraviesan nuestra alma y ascienden al cielo, como las alas hechas por el transilvano Aurel Vlaicu. ¡Y él, como ella, queridos míos, surgió de la capa profunda del pueblo ofendido, que eleva en las alas del canto o del pensamiento, convertido en pájaro de acero, sus deseos al cielo de la justicia y la liberación de un sufrimiento demasiado prolongado! » – Octavian Goga sobre Maria Tănase.
Una de las personalidades femeninas más importantes de la historia de Rumania fue la doctora rumana en gerontología Ana Aslan. Logró inventar el primer producto antienvejecimiento, Gerovital, que utilizarían personalidades como Tito, Charles de Gaulle, Khrusciov, J.F. Kennedy, Indira Gandhi, Marlene Dietrich, Konrad Adenauer, Charlie Chaplin, Kirk Douglas o Salvador Dalí.
La «cura» que ofrecía «juventud sin vejez» se inventó en 1952 y rápidamente se patentó en más de 30 países. Después de este éxito que cambió el mundo entero, Ana Aslan continuó sus estudios y lanzó, en 1980, junto con la farmacéutica Elena Polovrăgeanu, un nuevo remedio milagroso que lleva su nombre: Aslavital.
Nadia Comăneci, «La diosa de Montreal»