El sentimiento de amistad entre las naciones, especialmente las socialistas, fue cultivado asiduamente por la propaganda comunista y mucha gente todavía cree en él. Pero las lecciones de la historia demuestran lo contrario: cuando un país necesitaba ayuda de una nación considerada amiga, la mayoría de las veces no la recibía.
Según las teorías marxistas-leninistas sobre los medios de producción, la propiedad debía ser común, de todos aquellos que los usaban y producían plusvalía.
La instauración del régimen comunista en Rumanía, el 6 de marzo de 1945, significó la hegemonía del partido comunista no solo en la escena política, sino también en todos los aspectos de la vida de las personas.