Conversaciones sobre la reducción del déficit presupuestario
El déficit presupuestario récord sigue dominando el debate público en Rumanía
Bogdan Matei, 06.06.2025, 12:25
El análisis económico semestral de la Comisión Europea muestra que Rumanía es el único país de la Unión con desequilibrios macroeconómicos excesivos. Con casi un 9%, el déficit presupuestario es el más alto de todo el bloque de la UE y, según la Comisión, las autoridades rumanas no han tomado ninguna medida eficaz para corregirlo.
Citado por el corresponsal de Radio Rumanía en Bruselas, el análisis del Ejecutivo comunitario evalúa que el deterioro de la situación en Rumanía fue causado, entre otras cosas, por el aumento de los gastos corrientes, a través del incremento de los salarios y las pensiones. La Comisión pide a Rumanía que presente medidas rápidas y eficaces, porque si no lo hace corre el riesgo de no cumplir los objetivos de corrección del déficit para 2030 y puede entrar en procedimientos que le lleven a perder los fondos de la UE a partir del año que viene.
Lo que se sabe actualmente en Bucarest es que el lunes podría presentarse oficialmente un paquete de medidas para reducir el déficit presupuestario, tras las negociaciones que el jefe del Estado, Nicușor Dan, mantendrá con los líderes de los cuatro partidos proeuropeos que podrían formar el futuro gobierno: PSD, PNL, USR y UDMR.
Mientras tanto, prosiguen los debates en el seno de equipos técnicos formados por expertos de los partidos políticos. El presidente Dan declaró que ninguna de las propuestas fiscales que han aparecido en la prensa, que van desde el aumento del IVA sobre algunos productos hasta la imposición progresiva de los salarios, es aún definitiva. Para reducir el déficit al 7,5% del producto interior bruto, el Estado rumano necesita encontrar 30.000 millones de leus (equivalentes a unos 6000 millones de euros), ya sea recortando el gasto del sector público, con alguna subida de impuestos o con una combinación de ambas medidas.
En la oposición, los nacionalistas de la AUR afirman que no apoyarán subidas de impuestos, pero insistirán en un recorte del 10% del gasto público y la suspensión durante cinco años de las exenciones fiscales para determinadas categorías de trabajadores de la industria, la construcción y la agricultura. Mientras tanto, los representantes de los partidos prooccidentales sobre el terreno no han escatimado críticas a las medidas de austeridad previstas, que podrían afectar a sus comunidades.
El presidente del Consejo Distrital de Timis, el socialdemócrata Alfred Simonis, ha declarado que no aceptará que el Gobierno cancele la financiación del nuevo estadio de Timisoara y que es inaceptable que la mayor ciudad del oeste del país pague por «los errores de otros».
Por su parte, la dirección de la Academia Rumana rechaza categóricamente lo que califica de acusaciones infundadas e insuficientemente documentadas contra sus institutos de investigación y la investigación rumana en general, que, según los críticos, despilfarran fondos públicos sin producir gran cosa.
Versión en español: Antonio Madrid