Un comienzo de curso escolar tenso
El nuevo curso escolar en Rumanía comienza con el descontento de los empleados en el sector educativo
Roxana Vasile, 08.09.2025, 11:04
El nuevo curso escolar ha comenzado en Rumanía este 8 de septiembre, en un contexto de descontento entre los empleados en el sector educativo por las medidas de austeridad impuestas por el Gobierno de coalición PSD-PNL-UDMR-USR. Las grandes federaciones sindicales han hecho repetidos llamamientos a boicotear el inicio del curso escolar, y en muchos centros educativos no se han organizado las tradicionales celebraciones inaugurales. Sin embargo, a pesar de la ausencia de las actividades específicas del primer día de clase, los aproximadamente 3 millones de alumnos de preescolar y escolar han sido recibidos en las aulas. En Bucarest se ha anunciado una manifestación frente a la sede del Ejecutivo y una marcha de protesta hasta el palacio presidencial.
La principal queja es el aumento de la carga lectiva, que, en opinión de los sindicalistas, equivale a un recorte encubierto de los ingresos de los docentes de entre el 10 % y el 20 %, ya que los profesores se ven obligados a impartir más asignaturas diferentes para acumular las horas necesarias para completar la carga lectiva. Las quejas también están relacionadas con la reducción de la tarifa por hora, el aumento del número de alumnos por clase y la fusión de centros educativos con menos de 500 alumnos. En resumen, los sindicatos denuncian una crisis sin precedentes en la educación rumana en los últimos 35 años.
La educación, que, por cierto, ha estado sujeta durante todo este tiempo a reformas más bien fallidas de los ministros que han gestionado este sector a lo largo del tiempo. El actual ministro, el profesor universitario Daniel David, afirma en un comunicado que comprende las quejas, pero cree que estas no deben utilizarse para bloquear el sistema educativo, sino para elaborar medidas y reformas que lo mejoren.
Los cambios son de austeridad, no tienen como objetivo reformar el sector, responden los descontentos. Varias organizaciones de alumnos y estudiantes han anunciado que apoyan las protestas de los profesores y han denunciado, a su vez, la modificación del sistema de concesión de becas, que reduce considerablemente el número de beneficiarios, en nombre del esfuerzo colectivo que se exige a todos los rumanos de a pie para reducir el enorme déficit del país.
Según un estudio de la ONG World Vision Rumanía, al comienzo de este curso escolar, solo el 42 % de los alumnos rumanos dispone de todo el material escolar necesario, mientras que el 12 % no tiene prácticamente nada preparado para la escuela. Además, solo alrededor del 23 % ha sido informado de forma clara y completa sobre los cambios legislativos y las reorganizaciones que se están preparando en las escuelas, alrededor del 48 % solo ha oído hablar de ellos de forma resumida y más del 22 % no ha sido informado en absoluto.
Sin embargo, el 25 % de los alumnos se declara muy seguro y el 49 % bastante seguro de que la escuela los preparará para la vida adulta. Muchos desean una mayor cercanía entre profesores y alumnos, un método de enseñanza basado en ejemplos claros y ejercicios prácticos, menos deberes y un programa adaptado a las necesidades reales.
Versión en español: Monica Tarău