El derecho de los niños a ser consultados
La mayoría de los niños no saben que tienen el derecho a participar en los procesos de toma de decisiones que les conciernen directamente.
România Internațional, 26.08.2020, 16:49
La mayoría de los niños no saben que tienen el derecho a participar en los procesos de toma de decisiones que les conciernen directamente. Este es uno de los hallazgos de la UNICEF de Rumanía después de consultar con varios jóvenes en nuestro país y en la UE. Esto a pesar del hecho de que en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, hay un artículo que estipula su derecho a ser consultados. Para remediar no solo la ignorancia de los niños con respecto a sus derechos, sino también la negligencia de los adultos para hablar con los pequeños, la UNICEF de Rumanía ha tomado la iniciativa de establecer el Comité de los Niños, una comunidad de alumnos preadolescentes y adolescentes. Despina Andrei, gerente de comunicaciones y recaudación de fondos de la UNICEF de Rumanía ha hablado sobre los propósitos de este foro:
Es una iniciativa única a nivel nacional que la UNICEF de Rumanía lanzó el año pasado en enero de 2019 con el objetivo principal de alentar la participación de los niños, promoviendo un derecho incluido en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. Este es el artículo 12, que estipula la consulta y participación de los niños en la toma de las decisiones que les afectan. Estamos atravesando un período en el que las políticas públicas, ya se trate de Rumanía o de la UE, son elaboradas por adultos para niños. Es normal que sea así, pero es bueno formular estas decisiones junto con los niños porque influyen en su futuro. Por lo tanto, creamos este Comité, que incluye a niños de diferentes orígenes socioeconómicos. Provienen tanto del ámbito rural como de las ciudades, son niños típicos y niños atípicos, es decir, tienen diferentes discapacidades, son niños que viven en el entorno familiar, pero también niños que viven en instituciones públicas del sistema de protección infantil.
El primer paso dado por el Comité de los Niños ha sido adoptar un primer borrador de la Declaración de Bucarest de los niños en la UE, un documento que luego se envió a todos los Estados miembros de la UE. Ahora los niños esperan la reacción de las instituciones, según comenta Despina Andrei.
Nuestra intención es crear un mecanismo europeo para consultar a los niños sobre las decisiones que se refieren a ellos. Rumanía considera apropiado abrir este tema y comenzar a rodar una pequeña bola de nieve. Nosotros formamos esta bola y esperamos que los países que se hicieron cargo de la Presidencia de la UE después de Rumanía la hagan rodar para que crezca hasta que se convierta en una roca de nieve. Después de Rumanía, siguió Finlandia, y ahora Croacia ocupa esta presidencia europea. Sé por mis colegas de la UNICEF de Croacia que ellos también quieren crear un Comité de los Niños según el modelo rumano. También quieren continuar con esta iniciativa que Rumanía puso en la agenda política. Se sabe que el proceso legislativo de cualquier iniciativa es muy lento. Hablamos con los niños del Comité de los Niños y les decimos que somos pioneros en este área y que las semillas que crecen ahora solo darán fruto en unos cuantos años.
Sophia Cârlan tiene 17 años y es alumna del liceo Gh. Lazăr de Bucarest. Últimamente, ha hecho voluntariado para varias acciones cívicas. Por lo tanto, era natural para ella involucrarse en un proyecto que aboga por la participación de los niños en la toma de decisiones, como el Comité de los Niños, especialmente porque no sabía nada sobre su derecho a ser consultada. Sophia Cîrlan.
No sabía que tenemos el derecho a ser consultados. Así que cuando me enteré y descubrí que el Comité de los Niños de UNICEF estaba buscando nuevos miembros, quedé muy satisfecha. Vi que era posible. Entonces me dije que lo intentaría. Quiero aportar mi granito de arena para que las futuras generaciones de niños puedan ser consultadas y que las cosas cambien al menos para ellos, si no es posible para mi generación. Dos áreas que me interesan y las considero igualmente importantes son la educación y la protección del medio ambiente.
Un estudio realizado por la Fundación Friedrich Ebert el año pasado acerca de los jóvenes entre 14 y 29 años muestra que no están muy interesados en participar en la vida de la sociedad. Menos de una cuarta parte de los encuestados participaron en acciones públicas. En comparación con los otros nueve países del sudeste de Europa incluidos en dicho estudio comparativo, Rumanía tiene el porcentaje más bajo de encuestados implicados políticamente. ¿Qué opina Sophia Cârlan sobre estas estadísticas?
Esto es cierto porque los niños y los jóvenes no han tenido la oportunidad de involucrarse. Y, como no se les dio esta oportunidad, no saben de qué se trata. Les resulta sorprendente cuando descubren que tienen este derecho del que no sabían nada. El Comité de los Niños, entre otras cosas, también tiene como objetivo informar a los jóvenes sobre sus derechos. Estas estadísticas son preocupantes porque algunos de estos jóvenes son, de hecho, adultos jóvenes. Si de pequeños no fueron alentados a involucrarse, a medida que crecen se vuelven aún más reacios. Nosotros, en el Comité de los Niños, llevamos a cabo campañas de información. Mis colegas del Comité ya lo han hecho con sus compañeros de curso o de colegio. Se están preparando para hacer varias presentaciones del Comité y de la UNICEF a nivel local. Todo esto va lento pero estamos por el buen camino.
Actualmente, el Comité de los Niños cuenta con 34 miembros de los cuales 10 son miembros desde el año pasado, y 24 han sido elegidos recientemente a raíz de una solicitud en línea. Los candidatos tienen que responder a 15 preguntas formuladas por los niños. Los nuevos miembros incluyen a Rareş Dragomir, de 11 años, alumno de un colegio de Bucarest. Rares también quiere ser consultado cuando se tomen decisiones que lo afectarán directamente, especialmente aquellas relacionadas con personas con discapacidades locomotoras, una categoría a la que pertenece. Rareş Dragomir:
No puedo decir que tenga expectativas concretas, pero lo que sí quiero es ser escuchado y tener una voz que se escuche en la sociedad. Representamos al 20% de la población de Europa, somos el futuro y necesitamos ser escuchados. Hasta ahora mi vida ha sido hermosa incluso con mi discapacidad, gracias a mis padres. ¿Quién sabe cómo habría sido si hubiera tenido otros padres? Ni me lo quiero imaginar. Por el momento, no tengo una solicitud específica para ninguna institución como persona con discapacidad. Pero seguro que con el tiempo habrá algunos problemas que me gustaría señalar.
Los niños ciertamente tienen quejas que necesitan ser escuchadas y esperan que se establezca un mecanismo para su consulta lo antes posible a nivel de las instituciones públicas.