Los efectos económicos de la crisis

La situación de la pandemia provocó en la primera mitad del año la fuerte contracción de la economía rumana. Según el Instituto Nacional de Estadística, el producto interior bruto ha sido un 12,3% más bajo en el segundo trimestre en comparación con el primer trimestre de este año. A este resultado han contribuido todas las ramas de la economía, con aportes negativos más importantes en la industria, cuyo volumen de actividad ha disminuido alrededor de un 14%, en las actividades culturales y recreativas, en el sector de las reparaciones de productos del hogar y otros servicios, cuyo volumen de actividad ha disminuido en casi un 30%. Sin embargo, han registrado cifras positivas los sectores de la construcción, de la información y comunicación, de la administración pública y defensa, de la seguridad social en el sistema público, de la educación, la salud y de la asistencia social.

El ministro de Finanzas, Florin Cîţu, dice que la economía nacional registrará un crecimiento al límite en el tercer trimestre y evitará así la recesión técnica, es decir, dos trimestres consecutivos de caída del PIB. Agrega que en el próximo trimestre, el mayor riesgo proviene del aporte de la agricultura al PIB, pero apunta al papel positivo de las inversiones.

Incluso en estas condiciones, el analista económico Aurelian Dochia cree que es poco probable que a fin de año la caída del PIB sea solo del cuatro por ciento, como prevé el Gobierno. Aurelian Dochia:

“Las estadísticas confirman que en la primera mitad del año la economía de Rumanía se contrajo fuertemente, en línea con muchas economías europeas e incluso con economías de otras partes del mundo. Cuesta creer que para fin de año las cosas mejoren tanto que la caída interanual total del PIB sea inferior al 4%, como espera el Gobierno, porque hace falta recuperar una caída del 10%. No es nada fácil, dado que los riesgos que afectan la economía siguen siendo muy altos. Es cierto que la economía europea y las economías de los principales socios de Rumanía, Alemania en particular, están mostrando algunos signos de recuperación, pero es poco probable que regresen muy rápidamente a los niveles anteriores. Entonces, la disminución anual del PIB en Rumanía podría ser del 5-6%”.

En el mismo contexto de la pandemia, un estudio del Instituto Nacional de Estadística (INS) muestra que más de un tercio de los hogares de Rumanía cubren con dificultad o con mucha dificultad los gastos de la vida corriente y, si tenemos en cuenta a los que declaran que tienen cierta dificultad para cubrir los gastos del día a día,  llegamos al 77% de todos los hogares.

Según el estudio del INS solo para uno de cada cinco hogares los gastos no plantean problemas especiales y consiguen cubrirlos con facilidad. Más de la mitad de los hogares considera que los ingresos necesarios para cubrir los gastos corrientes deberían ser superiores a los 3000 lei al mes (más de 600 euros).