Historias del «corazón de Transilvania»
Érase una vez un reino de los cuentos de hadas. Así podría comenzar nuestra historia que nos lleva a un área en Transilvania, conocida como las colinas de Transilvania. Y había un hombre apasionado por la fotografía y algunos turistas que venían a descubrir las bellezas de nuestro país e inmortalizarlas en las fotos.
Daniel Onea, 04.08.2020, 15:21
Estamos en el centro del país, en el triángulo formado por Sibiu, Făgăraş y Sighişoara, en el valle de Hârtibaci, una zona también llamada las colinas de Transilvania, la segunda área protegida más grande de Rumanía. Citamos: «Aquí puedes venir como visitante y quedarte toda la vida», según dice el lema de una película documental, hecha precisamente a partir de estos elementos: un lugar, un fotógrafo y unos visitantes. Algunos de los cuales venían tan a menudo que han decidido quedarse aquí y disfrutar del nuevo hogar.
Mihai Moiceanu es fotógrafo y cineasta y nos amplía más detalles sobre su trabajo:
“Mi película cuenta la aventura de una familia de Alemania, que trabajó en multinacionales y que visitó Rumanía por primera vez hace 15 años. Siendo fotógrafos apasionados, los llevé por Rumanía en algunos recorridos fotográficos. Se sintieron atraídos por estos lugares, compraron una propiedad vieja y vacía, construyeron una casa de huéspedes muy agradable y se establecieron allí y ahora viven en Transilvania».
Un proyecto nacido en una de las campañas llevadas a cabo el año pasado junto con la Asociación de Ecoturismo Rumanía y la Fundación de la Asociación, destinado a promover destinos de ecoturismo en Rumanía, según nos ha contado Mihai Moiceanu.
¿Por qué eligió las colinas de Transilvania como tema de su documental? Mihai Moiceanu:
«Una de las ventajas de Transilvania es el hecho de que hay una vida rural con una tradición de cientos de años, hay monumentos muy interesantes, poco conocidos, pero muy valiosos y espectaculares en términos de construcción, ubicación, hay comunidades rurales muy interesantes, donde las tradiciones se han mantenido y en las que pueden tener unas vacaciones activas, lo que significa que además de visitar las atracciones turísticas, pueden ver cómo se hace la vida en el país, cuál es el ritmo de vida en el país, cuáles son las preocupaciones de la gente, cómo se vive en un hogar, pueden comer platos típicos muy ricos, todo muy sabroso con alimentos orgánicos».
Una región de pastos, prados y bosques caducifolios, reconocida por su biodiversidad, por sus prácticas agrícolas antiguas y artesanías tradicionales, reuniones mensuales que destacan el patrimonio construido y por el paisaje cultural sin cambios del período medieval, las colinas de Transilvania les esperan para descubrirlas.
Aparte de las imponentes iglesias fortificadas, aquí pueden visitar iglesias de piedra, construidas a principios del siglo XIX, cuyas pinturas llevan la firma de la familia de pintores Grecu, reconocidos en toda la zona por su forma personal y moral de interpretar escenas bíblicas y la sociedad en los iconos pintados.
Mihai Moiceanu también nos ha dicho quiénes son los héroes de la historia que podemos ver en su película:
“He organizado recorridos fotográficos en Rumanía durante muchos años, recorridos para fotógrafos aficionados o profesionales, en los que podemos descubrir diferentes lugares del país, con paisajes y tradiciones, y también gente de la aldea. Y algunos participaron en uno de mis recorridos y luego vinieron constantemente para las excursiones que estaba haciendo en Rumanía. Así nos hicimos amigos. Pero la película vino de una dirección completamente diferente, ya que fue propuesta por la Asociación Rumana de Ecoturismo, que quería promover las áreas de ecoturismo en Rumanía. Como las colinas de Transilvania son un destino de ecoturismo, propuse hacer una película con el tema de la historia de esta familia, que se ha convertido en una historia muy interesante para el público».
La película «Las colinas de Transilvania, el corazón de Transilvania», realizada por Mihai Moiceanu, ha gozado de mucho éxito y eso porque nos lleva a una zona que atrae no por ser espectacular, sino por su simplicidad, según nos ha contado nuestro invitado:
«En general los turistas que llegan a Rumanía, no se sienten atraídos por paisajes formidables, como los Alpes, por decir, sino por la comunión entre el hombre y la naturaleza, porque la naturaleza se entrelaza muy bien con la tradición popular, con la vida de nuestra gente. Y eso es lo que realmente los atrae. Otro aspecto es que todavía se encuentran viejas tradiciones aquí, una vida simple, muy anclada en los recursos de la tierra y esto los impresiona: el hecho de que pueden encontrar una civilización que desapareció de Europa occidental hace 50-70 años».
Una película que te invitamos a ver, porque el cine y la fotografía te permiten otro tipo de acceso al espacio íntimo de las personas, que se revela frente a la cámara.
(Versión española: Simona Sarbescu)